Mis primeras creaciones

Después de mucho aprender de una gran maestra (Alquimia Jabonil, ¡eres impresionante!!) y mucho practicar, ya he dado a luz mis primeras creaciones de las que me siento muy orgullosa.

Me han salido unos jabones que más que jabones parecen bizcochos, de textura están genial, muchas burbujas y dejan la piel que parecen crema.

Los he hecho de Aceite de Oliva Virgen Extra, Coco Bio Virgen Extra, Manteca de Karité Bio, Aceite de Cártamo Bio, Leche de Avena Bio, Miel y Vainilla… que le dan las siguientes propiedades:

  • Poderosa acción limpiadora, cuidando la estructura de la piel manteniendo su ph y previniendo su deshidratación, gracias a la leche de avena
  • Antiinflamatorios, Nutrición y propiedades regeneradoras gracias a la miel
  • El aceite de cártamo le aporta los beneficios de hidratación y antioxidante, muy beneficioso para las pieles atópicas.
  • El aceite de coco y el de oliva le terminan de aportar las cualidades hidratantes, regeneradores y antibacteriales que hace de este jabón, un jabón maravilloso para las pieles más secas.
  • … y como no podía ser menos, el toque de aromaterapia de la vainilla que aporta esa sensación de tranquilidad y calidez al recordar momentos de la infancia. Es un aroma que relaja pero revitaliza..

Más adelante hablaremos más en detalle de cada ingrediente, pero no quería pasar más tiempo sin haceros la presentación de mis primeras creaciones.. Que los disfrutéis…

El Baño

El baño para mí es un templo de relax y cuidado, pero mi mayor descubrimiento y donde estoy poniendo todos mis esfuerzos, es el arte de hacer jabones y cosmética natural..

En cuanto vi el primer jabón en casa de los abuelos no paró mi mente de pensar en qué maravilla era y pensar en el cómo…

Poco a poco estoy aprendiendo y es verdad que el resultado en nuestra familia está siendo maravilloso… ¡Nuestros problemas de piel parecen estar encontrando su luz! … y cómo no, cuando tienes una enfermedad auto-inmune, lo que primero que pasa por tu mente es darle a tu cuerpo las cosas más naturales posibles… y es que en esto, ¡los abuelos son grandes expertos!